Profesor
dijo la niña
¿alguna vez publicaré una prédica?
¿Y por qué
esa pregunta?
Dijo el profesor
La niña lo miró
y dijo
solo preguntaba
Y en la niña
se quedó
un pensamiento
¿Será creyente
el profesor?
Y una duda vino a su mente
Y pasaron los años
y la niña era una gran predicadora
el profesor la miró y le dijo tú fuiste mi alumna
Sí profesor
dijo ella
y yo le hice una pregunta
Sí me acuerdo
y discúlpame que no te respondí
me dejaste sin palabras
No se preocupe profesor
y él le preguntó
¿eres predicadora?
Sí profesor
hace unos años
soy predicadora
¿Y sabes lo que pasó en mí?
Le preguntó con suavidad
y ellos seguían conversando
Y el niño dijo
y aquí ya debo terminar el poema
¿y cómo lo termino? Decía el niño
Qué hago necesito un poeta
qué pasa
si yo soy el poeta
Yo soy el que dirijo las palabras
y los lectores me siguen
y ellos van conmigo de acuerdo a cómo va el poema
Yo soy el poeta
yo soy el que dirijo
yo soy el que manejo las palabras
Yo utilizo un lenguaje
para llegar al mundo
y es la sutileza de mi poesía para capturar lectores
Qué pasa
tengo que poder esto
el lenguaje está en mí
El mundo espera mis hazañas
el mundo espera mi prosa
y el mundo espera la magia de mi poesía
Una magia que no termina
yo soy
yo soy el poeta
Qué pasa
tengo que poder esto
yo soy el experto en las palabras en la rima
Y el niño
continuaba escribiendo
y en una prosa tan hermosa bella y didáctica LLEGÓ A SER UNO DE LOS MÁS FAMOSOS POEMAS A NIVEL MUNDIAL ...
Manuel Núñez del Prado Dávila
Escritor peruano
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