Hoy una hermosa chica
se sentó a mi lado
ella me miraba
yo la miraba
sentí su cuerpo cerca junto al mío
con la mirada le decía muchas cosas
y de pronto la chica bajó
y entendí que tal vez faltó
más brillo al peso de mi mirada
y a veces hay que soltar frases
para avivar un fuego
porque todo puede desvanecerse
si muchas frases hermosas solo quedan en el pensamiento.
Manuel Núñez del Prado Dávila
Escritor peruano
No hay comentarios:
Publicar un comentario