- Gracias por tu aliento amigo.
Como dice un pastor estamos llamados a alentar.
- Pero por lo visto.
Trato de entenderte, muchos no hacen nada.
- Hace poco un predicador decía suponiendo que nunca te alienten, y que cada mañana te despiertes y nunca ni siquiera una llamada para decirte algo.
Y sabes.
- Dime.
Si sé lo que dijo este predicador y me dolió.
- Por...
Cosas que pasaron en mi vida.
- ¿Y tú alentabas?
Ese era uno de mis problemas hasta que un día un amigo de mi colegio partió.
- ¿Te refieres a qué murió?
Sí.
- Creo que voy entendiendo.
Nunca lo alenté y anoche cuando escuché una prédica como que en mi mente me decían porqué no alentaste y creo que voy a escribir una pequeña historia.
- ¿Sobre tu vida?
En parte sí pero quiero ir más allá de eso.
- ¿Dejar un mensaje?
Esa es la idea porque veo que los valientes son muy pocos.
- Me haces acordar a lo que un escritor dijo que dentro de tu valentía como creyente está el que alientes.
¿Digo el nombre del escritor?
- Déjalo ahí nomás.
¿Para que todavía no se revele el misterio?
- Así parece, bueno es una broma chico.
Y yo que te sigo el juego y la vez pasada le dije a un pastor si yo peleara como Bruce Lee.
- Por...
No sé pero a veces...
- Creo que lo voy a poner en un blog ¡eh!.
Nunca hagas eso amigo pero me gustaría estar en un auditorio y decirles a todos los creyentes alienta, estás llamado a alentar porque como dicen algunos argentinos que conozco porque me da bronca.
- Si supieras amigo todo lo que he pasado y nunca me alentaron y me dije a mí mismo ¿y dónde están los valientes? Y me di cuenta que a la hora de la hora...
No llores amigo...
Manuel Núñez deel Prado Dávila
Escritor peruano
Es parte de una de mis novelas que todavía no he publicado...
No hay comentarios:
Publicar un comentario