Hay mujeres
que tienen una mirada
que aloca
y que perturba
y hoy una de ellas me miró con tanta ternura
que me enamoré en el acto
mis ojos brillaban como nunca
me tomó la mano
nos besamos
caminamos por aquel parque sonrientes
ella era feliz
demasiado feliz
y yo dichoso la llevaba del brazo
era un encanto
un amor
una ternura
qué belleza tener un amor así
nunca lo tuve
solo es un poema
que dará la vuelta al mundo
entre rosas flores y jazmines
no lloren
y si alguien me quiere
y su mirada es intensa
la espero
la espero en la ribera del río
entre rosas flores y jazmines.
Manuel Núñez del Prado Dávila
Escritor peruano
No hay comentarios:
Publicar un comentario