martes, 6 de diciembre de 2016
Ingresé a facebook y el silencio era grande
Me quedo con tu voz
me quedo con tu aliento
y tú ya no estabas
Ingresé a facebook
y el silencio era grande
Y los amigos
que uno creía tener
no eran amigos
Hoy esa palabra
la guardo
para alguien especial
porque la vida me enseñó
que a cualquiera
no se le llama amigo
Tiene que haber algo
aunque sea mínimo
para que se le pueda considerar
un amigo
Y los "amigos"
en facebook
no existen
Y los pocos
que verdaderamente hay
no aparecen
Y está probado
que el orgullo
la mezquindad
pesa tanto
que es por eso en parte
que no aparecen
Y en muchos casos
existen conveniencias
pero no amistad
Y como alguien me dijo
Vale también dejar
poemas vivos
para el recuerdo
De esos que dijeron algo
y trataron de ayudar
a un cambio
Me hubiera gustado decir
los amigos en facebook
son maravillosos
Pero hay un silencio total
nunca un me gusta ni siquiera
a una foto hermosa
de familia
Nunca un me gusta
a un mensaje precioso
de cambio de vida
Nunca un me gusta
ni siquiera a cuando uno los apoya
con tantos me gusta
a lo que ellos vienen publicando
Y decidí
escribir este poema
para dejar algo muy claro
Tal vez pocos me gusta
a este poema
pero valen los poemas
que también son claros
y precisos
tratando de dejar un mensaje
Y hay muchos en facebook
que ignoran intencionalmente
y es bueno decir algo
porque siempre alguien
valorará en lo más íntimo de su ser
los poemas que son claros
Y si nadie da un mensaje sobre esto
se pensará que todo está bien
y eso NO ES CIERTO.
Manuel Núñez del Prado Dávila
Escritor peruano
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