Una vida cristiana tiene que ser visible tanto para edificar como para evangelizar...

Y él le dijo no puedo contar contigo para sembrar porque no eres cristiano.

- ¿Y se amargó?

Un poco, pero realmente no podía contar con él para una siembra.

- Se puede contar con Juan para ciertas cosas pero no para lo espiritual.

Alguien que no nació de nuevo hay cosas que no puede hacer, y nunca lo hará si ese corazón no cambia.

- Y no tiene que ver con carácter.

Correcto.

- Sino con un corazón que no ha sido cambiado.

Y mientras siga creyendo en imágenes.

- Es obvio que no ha nacido de nuevo, por más que diga no Mario yo soy cristiano.

Como dijo un escritor ser cristiano se demuestra para que tu vida interior sea visible, y todos se darán cuenta que eres creyente.

- Una vida cristiana tiene que ser visible tanto para edificar como para evangelizar.

Porque si no predicas por un aparente respeto a ciertas ideas no estarías sembrando lo que un cristiano debe sembrar.

- Es un asunto de predicar y predicar y no de que soy respetuoso de la vida de las personas, porque si uno no predica no estamos haciendo lo que debemos hacer, y es precisamente por la predicación de la palabra de Dios que él está obrando para que muchas personas estén recibiendo a Cristo Jesús como su salvador personal. Es la obra de Dios pero los cristianos tienen que predicar.

Un creyente lo entiende y debe empezar a predicar, un religioso cuestiona y critica, y no predica.

- Alguien que no nació de nuevo realmente no valora este mensaje, está ciego espiritualmente.

Como dijo un predicador aunque duela pero hay que decir la verdad.

- Así es amigo.

Lo que se trata es de agradar a Dios y sembrar su palabra, y hay momentos en que tienes que ser muy claro sino el mensaje no se entiende, y puede parecer como que todos dicen lo mismo, pero no es así, una cosa es realmente predicar la palabra de Dios y otra es enseñar ideas humanas, y el que ya tiene a Cristo Jesús como su salvador personal entiende el mensaje, y lo que debe hacer es cada día predicar la palabra de Dios.

- ¡Amén!.

Manuel Núñez del Prado Dávila

Escritor peruano

"Fragmento de una de mis novelas"...