Mi hermano como quedándose pensativo por unos instantes, algo así como si estuviera recordando de cómo se dieron las cosas seguidamente nos dijo -cuando yo me estaba acercando a ella ya decidido a tratar de buscarle conversación, hubo un momento en que me quedé muy indeciso, sin saber si acercarme y tratar de hablarle o mejor no hacerlo. Pensaba en una y otra cosa, no ordenaba bien mis ideas. Me preguntaba asimismo qué decirle ni bien me acercara a ella. Quería evitar al máximo el cometer algún error o alguna imprudencia cuando ya estuviera a punto de querer decir algo, para dar inicio a esa conversación que intencionalmente estaba buscando. Y también -decía luego- antes de acercarme a ella por un momento la contemplaba fijamente, observaba ese rostro encantador y ese hermoso cuerpo, y por un instante imaginé que sus ojos miraban fijamente a los míos y que ella lentamente se iba acercando a mí y luego que me daba un beso en la mejilla. Y no les miento al decirles que esta chica desde un primer momento ni bien la vi me ha gustado grandemente, y yo cuando ya estaba a punto de acercarme a ella y decirle algo trataba de darme todo el valor suficiente para poder hacer esto, y así fue cómo llegó ese momento de hablarle. Al comienzo cuando recién de parte mía iniciaba la conversación, no sabía exactamente qué decirle o cómo presentarme, pero felizmente esta chica resultó de buen carácter y de un humor que se presta a hacer amistad, entonces en ese sentido o por ese lado la situación se me presentó favorable para poder hacer amistad con ella. Nos preguntábamos una y otra cosa...
- Y debemos suponer -dijo mi primo- que le has preguntado su nombre.
- ¡Claro! cómo no le voy a preguntar -contestó mi hermano.
- Dada la situación favorable en que te encontrabas -le decía mi primo- aquella pregunta para ti era inevitable.
- Así es y que no te quede la menor duda -contestó.
- Y tú crees -le dijo- que entre ustedes puede haber algo.
- Podría ser -respondió.
- Pero piensas, que no le eres nada indiferente -siguió diciendo.
- Sí, así lo pienso -contestó.
- Qué detalle o aspecto en particular por parte de ella -le dijo- te hace pensar así.
- En parte me parece -respondió- por la forma cómo me miraba en algunos momentos. Y cuando me miraba así me daba la impresión como que me estaba dando a entender, o bien queriéndome decir que yo le gusto, que le caigo bien, que le soy simpático... Y saben, si tuviera cierta capacidad para escribir... me gustaría decir en algún libro... lo hermoso de ese momento... de esos ojos que impactaron en mí... y más adelante... en el paso del tiempo, decir: y sabes... cuando caigo... tú me levantas...
Manuel Núñez del Prado Dávila
Escritor peruano
Es parte de una de mis novelas que todavía no he publicado...
MANUEL NÚÑEZ DEL PRADO DÁVILA - Wikio Sources
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