miércoles, 8 de septiembre de 2010

mis ojos empezaron a llorar...

Hoy al despertar
mis ojos
estaban llorando
y comprendí una vez más
que tú nunca
me habías abrazado
que nunca hubo ese momento
en que tus labios
buscaran los míos
nunca hubo un momento
en que tus manos
apretaran mis manos
nunca hubo una tarde
en que al mirar a tus ojos
tú me dijeras
sabes
nunca como hoy
he pensado en ti...

Y como dije en aquel verso
hoy me refugio en tu mirada
y es todo lo que tengo...

Y cuando ya iba a cerrar estas líneas
al voltear
era mi buen amor que me decía
en qué piensas
y yo te respondí
me acordaba de aquellos días
cuando tú aún
no eras mía
y en aquel momento nos abrazamos
llené tu cuerpo de besos y de caricias
como los lirios de la mañana
los pajarillos cantaban
y una vez más me dijiste
que yo también era
el amor
que tú esperabas...

Y cuando ya iba
a besar tus labios
alcanzaste a decirme
te amo...

Y cuando mis labios
ya estaban cerca a los tuyos
¡oh Dios!
me dijiste
que yo también soy
tu cielo lindo...

Y sabes
me seguías diciendo
nunca como hoy
he pensado en ti
y me acordé de aquellos versos que dije
y comprendí una vez más
que los sueños sí se cumplen...

Y en aquel momento me desperté
y entendí
que yo tan sólo
había soñado...

Pero siempre diré como en aquellos versos
que los sueños...
no terminan
porque cuando un amor es intenso
la inspiración sigue
y siempre habrá un motivo para decirle
ya por ejemplo
mi amor
este poema
es tan sólo para ti...

Claro, claro que sí
y el auditorio se puso de pie
y alguien dijo
a gran voz
él es
nuestro escritor romántico
y una chica acercándose me dijo
no te imaginas cuánto toca tus poemas
nos haces reír
nos haces llorar
y es la gracia de Dios que está en ti
para sensibilizarnos
y hacernos ver
y hoy a través del internet
de que nunca debemos dejar de decir
una palabra de aliento
y aún cuando el tiempo pase
en aquellos que tienen la dicha
de tener a alguien
quien se preocupa por ti
que está al tanto de tus cosas
que te espera en algún lugar
o que ya está viviendo contigo
pero nunca dejar de decirle
como en las primeras veces
que tú te mueres,
te mueres por ella...
Y cuando esto me decía la chica
mis ojos empezaron a llorar...


Manuel Núñez del Prado Dávila

Escritor peruano

Es otro de mis poemas....

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