Hay mujeres
con una belleza interior
increíblemente hermosa
aparte de la belleza de su mirada
de sus ojos
de su cuerpo
nunca tuve la dicha
de que una mujer así me abrazara
que me llevara lentamente a lo más hermoso de lo literario
que me lleve a los ríos
a los mares
a los valles
nunca tuve la dicha
de labios inmensos que "atacaran" mi alma
y el niño seguía escribiendo
y al poco tiempo murió
y dejó al mundo un poema triste
y no se dio cuenta que dejó
uno de los poemas más bellos
y hoy muchos lloran por la preciosidad artística de sus poemas
y cuando van a su tumba muchos recitan este poema
un poema único
pero quizá inigualable en el mundo de la literatura.
Manuel Núñez del Prado Dávila
Escritor peruano
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