jueves, 24 de junio de 2010

Gracias mi cielo lindo...

Sabes, como a veces te digo.

- ¿Qué?

Aun cuando callas eres hermosa...

- Algo así que al punto tal de escribir un poema para mí.

Claro, y tú lo sabes...

- Como dice mi papá -a veces basta el sentimiento; pero que hay momentos en que debe haber cierto esfuerzo según el caso claro está -precisaba mi papá- para expresar cosas, o bien decir ya por ejemplo en un escrito: lo que se siente por la persona amada...

Me gustó lo que dice tu papá, y sabes.

- Sí.

Suena muy lindo...

- Y nunca te dije -le dijo ella- que una de las cosas que me gusta de mi papá es el que él es tierno, y tiene esos momentos en que se acerca a mi mamá y le dice: si yo pudiera decir algo, es que me gustaría vivir eternamente para por siempre decirte que eres mi amor perfecto; y luego le decía: porque un día tocaste mi corazón y te acuerdas te escribí un poema, y uno de los versos decía: me muero, me muero por tu amor... Pero un día -le dijo luego- aun cuando callaste pero algo me decía, que debía seguir insistiendo...

Precioso ¡eh!.

- Y me creerías si te digo que he derramado lágrimas en determinados momentos.

Sí, sí te creería.

- Y he derramado lágrimas, cuando me acuerdo de tantas cosas, de esa niñez que no volverá, de esos abrazos de mi padre cuando yo era niña, cuando me llamaba y me decía: mi hijita linda y cuando seas grande -me seguía diciendo- sabes, vas a ser hermosa y me decía tantas cosas que aunque parezca mentira cada día lo recuerdo...

Según lo que me has comentado, te quiere mucho...

- ¡Oh sí! pero también igual los quiere a todos mis hermanos; aunque a veces pueda parecer que a mí me quería más...

Y si en caso fuera así, es que tú también desde niña has sido muy buena con él.

- Sí, y lo sigo siendo y sabes, te comento un detalle cuando yo era niña siempre quería que él me alzara en sus brazos; pero luego también yo miraba a mi mamá y le pedía que me alzara. ¡Oh Dios! qué hermosos momentos. A veces, cuando estoy en mi cuarto siento como que mi cuerpo se conmueve y quisiera aunque sea por un breve momento volver a ser niña. Hace poco le escribí un poema a mi papá y ahí le dije: papito / aunque el tiempo ha pasado / pero tú siempre serás para mí / mi papito / mi papito / Y yo siempre seré tu niña / y cuando quieras buscarme / aquí estaré / correré a tus brazos...

Y en aquel momento ya no pudo continuar, y sus ojos se bañaron de lágrimas...

Hay tantas cosas que recordamos mi cielo, y yo te entiendo.

- Gracias -le dijo- porque yo sé que eso es cierto...

¿Y quiéres que te diga algo más?

- Sí, dime.

En recuerdo a esos tantos momentos de tu niñez, y otros aspectos, y aunque no soy escritor pero voy a empezar a escribir una novela.

- ¿Por amor a mí?

Claro mi cielo lindo...

Y se abrazaron en aquel momento...

- Y sabes, aunque nunca te lo dije pero hoy te digo: que cuando tú me miraste por primera vez yo también me di cuenta que tú eres el hombre que yo esperaba...

Gracias mi cielo lindo, porque también es bueno que yo escuche estas cosas...


Manuel Núñez del Prado Dávila

Escritor peruano

Es parte de una de mis novelas que todavía no he publicado...


Te amo, te amo mi cielo lindo... Eres hermosa, única y especial... Te admiro; claro que te admiro...

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