Decisiones sabias pero basadas en la palabra de Dios

En política
cuando un odio es excesivo
todo lo que les conviene
se quieren tumbar
que se vayan estos
que se vayan aquellos
y ellos se creen
la reserva moral del país
donde muchos se dicen ateos
otros agnósticos
no creen en los valores espirituales
no les importa lo que diga la palabra de Dios
en política para ellos
todo es una cuestión de Estado
son ellos
ellos y sus pensamientos
su lógica
su manera de ver el mundo
solo lo terrenal
y nada más que lo terrenal
lo económico
lo social
lo pedagógico
pero en el modo de ver de ellos
y muchas cosas bajo un razonamiento determinado
no importa lo que diga la Biblia
no importa los valores espirituales
para ellos lo determinante
coyunturalmente hablando
es tumbar a los opositores
que se vengan al piso
que no existan
y cuando hay políticos
que tienen cargos muy altos
que se prestan
para esa lógica
facilitan un camino
a ese grupo
a esa cúpula
que no creen en Dios
no les importa para nada lo que dice la Biblia
solo el tiempo presente
y la determinancia de valores terrenales
y esta es una breve reflexión
para tomar en cuenta particularidades
y en los que somos creyentes
tener mucho cuidado
a quién apoyamos más
y muchas veces no hay que decidir por emoción
y promesas terrenales coyunturalistas
sino que predomine
nuestra fe a un nivel más alto
de mayor humillación a nuestro Dios
y en ese nivel espiritual
entender
qué nos aleja
y qué nos puede acercar a Dios
más allá de ciertas cosas
que se puedan subsanar
pero dentro de un régimen determinado
dentro de una democracia
que resalte los valores espirituales
que los tenga presente
que se vea
que se aplique de alguna forma
que no se minimice
que no se ningunee
tenemos que estar despiertos espiritualmente
y no dejarnos engañar
por todos esos grupos
liderados por personas
que realmente no creen en la palabra de Dios
que no han nacido de nuevo
y ven el mundo
y su cambio
de acuerdos a expectativas terrenales
no
no nos dejemos engañar
y este escrito
es una reflexión
para tomar decisiones sabias
pero basadas en la palabra de Dios.


Manuel Núñez del Prado Dávila

Escritor peruano