- Es tiempo de mejorar cosas, de ver la vida de otra manera... Así se habla amigo.
- Y a decir verdad hace tiempo que no mencionaba estas palabras...
Como que nos vamos olvidando.
- Creo que sí... y sabes no nos gusta reconocer que en ciertos aspectos estamos fallando grandemente... y algunos piensan que todo está bien ¿y cuál es el problema?
Sí... hace poco un amigo supuestamente agnóstico de un momento a otro me decía que eso de acercarse a Dios es cosa del pasado, que hoy la vida es diferente... y le pregunté ¿qué tan diferente es? Y me miró sorprendido.
- Quizá no supo qué responderte...
Creo que hay algo de eso... aunque ya en otro momento me decía yo no sé si soy ateo o agnóstico, pero la verdad es que no me gusta hablar de Dios y menos escuchar prédicas, y además yo no creo ni en el cielo ni en el infierno, así como estoy me siento muy bien y punto, y después bromeando me decía y tú qué eres: religioso, ateo, agnóstico o cuál es tu problema, ¡ah caramba! y encima gracioso le dije, así es hermano me dijo hay que sonreirle a la vida, al tiempo malo buena cara y además a mí quién me asegura que después de esta hay otra así que yo mismo me sirvo, me atiendo, me doy mis gustos, salgo a pasear, busco chicas, tomo, tomo y sigo tomando, total la vida es una... así me enseñaron mis hermanos mayores cuando yo era niño, que disfrute la vida cuando sea grande... y la verdad aquí entre nos... no sé si lo estoy disfrutando o solamente estoy haciendo tiempo, a veces tengo mis dudas...
- ¿Y esa fue la primera vez que te habló así?
La verdad sí y me sorprendió.
- Y yo también estoy sorprendido... porque él tiene en el poco tiempo que lo conozco esos momentos en que es parco y cortante y por ahí un de vez en cuando como que dice algo, pero esta vez que te habló a ti por lo visto se extendió como nunca... quizá estaba muy contento...
Uhm... creo que sí...
- Y yo por ejemplo aunque ahorita no estoy muy contento pero ahí estoy y como dicen algunos predicadores: para adelante...
Así es amigo... aunque a veces no estemos con la alegría desbordante... como que ya no tiene sentido ciertas cosas, que para qué voy a seguir haciendo esto, no me escuchan, no se interesan por mí, no hay un abrazo, no hay un te quiero, no hay una llamada que te digan: sabes, es lindo lo que estás diciendo, etc, etc, etc... pero aún así tenemos que continuar... hoy me levanté por ejemplo sabiendo que nadie preguntaría por mí...
- No llores amigo...
Disculpa... sólo que a veces también me pongo sentimental...
- Te entiendo.
Pero sabes... hay que ser guerreros...
- Y eso que mencionas lo escuché hace poco a un predicador.
¡ Ah caramba!
- Y me gustó mucho ese tono en que lo decía... nos alentaba... y en una parte dijo: a mi esposa y a mis hijos cada mañana les digo, hay que ser guerreros... y este día es una nueva oportunidad para seguir adelante... el perdón de ayer tiene que continuar, el abrazo es eterno, la sonrisa es por siempre... y así seguía diciendo cosas... y por ahí había una pareja de enamorados y parece ser que la chica fue muy tocada por la prédica... porque sus ojos estaban llorando... y yo ahí muy solo en la banca sin que una chica llore a mi lado...
¡ Ah mi amigo! también le pusiste ese toque sentimental...
- Y sabes... creo que eso de leer ciertas historias, de ahí estoy aprendiendo...
Escritor peruano
Es parte de una de mis novelas que todavía no he publicado...
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