viernes, 21 de enero de 2011

Una vez más te inspiraste...

- Caminamos lento aquella noche...

¿Te quiere?

- Creo que sí... me gusta sus ojos, sus labios...

Como dijo una amiga, si la quieres que ella lo sepa...

- ¡Uhm!... esa parte sí que está un poco difícil... tengo miedo que me rechace, y cuando niño escribía algún verso y un poco más y clamaba que nunca me digan no...

Sabes.

- Te escucho.

Me hizo acordar a un verso que yo escribí, pero pasó el tiempo y en una oportunidad le dije a una chica: el día que yo me enamore no quiero que nunca me digan no, me miró un poco sorprendida y me preguntó porqué, no lo sé le dije... pero será tal vez que sólo imagino cosas lindas del amor, caminar a la orilla del mar... ¡Oh Dios! -me dijo- creo que eres poeta... no le respondí... sólo que que a veces como que fluye dentro de mí un verso... creo que va más allá me respondió...

- ¡Ah caramba! la chica hizo un análisis contigo.

Nada que ver amigo.

- Pero puede ser...

Recién nos conocíamos...

- Hubieras empezado por ahí.

Para la próxima amigo.

- Hum... graciosito...

A veces amigo, a veces...

- Pero no llores ¡eh!.

¡Ah!... eres gracioso...

- Es que te veo como que lo dices en un tono...

¿Un poco triste?

- Creo que sí... pero los hombres no lloran...

Eso dicen algunos.

- Y es cierto... como dijo un poeta: llorarás aun en silencio, porque ella fue, ella fue el amor de tu vida...

¡Oh amigo!... no tengo enamorada... no hay quien me diga: sabes, esta noche esperaré por ti, y caminar con ella a la orilla del mar, decirle un verso o cantarle una canción; creer que sí puedo, que la felicidad; también es para mí, que ya no hay llanto en mis ojos, que despierto y sé que en la noche alguien me abrazará, que sus manos cubrirán mi cuerpo... ¡oh Dios!...

- Viste.

Qué.

- Una vez más te inspiraste...


Manuel Núñez del Prado Dávila

Escritor peruano

Es parte de una de mis novelas que todavía no he publicado...


No hay comentarios:

Publicar un comentario