Nunca me alejaré
de la novela
ahí están mis pasiones más intensas
ahí están los campos
para predicar
ahí están las musas
para soñar conmigo
ahí están los hombres en las cantinas
y puedo llegar a ellos
a través de frases más grandes
de caminos que conocen
la brisa
el mar
una mujer sentada
esperando una copa
una mirada
para el empiezo de una caricia
una música de fondo
que toca todos los sentidos
un abrazo que perdura por siempre
una noche que no se acaba
unas caricias que se hacen cada vez más intensas
puedo jugar con frases
para llegar a ellos
puedo crear diálogos
crear fantasías
sueños distintos
puedo predicar el evangelio
con sutileza
me "enfrento" a otros escritores
en debates académicos
me "enfrento" a filósofos
en terrenos que ellos conocen
y yo "golpeo" con argumentos y frases
hago de la novela
construcciones "enormes"
lo que los poemas no me permiten
nunca me alejaré de la novela
es mi campo
ahí construyo "edificios"
para llegar al mundo
al niño que no tiene que comer
a las parejas que les falta más aliento
a los padres que no son valorados por los hijos
a las chicas que quieren más frases para su mundo
en la novela juego y construyo muchas cosas
pero a veces me meto con fuerza en la poesía
porque tal vez hay un talento para ese campo
soy un escritor versátil
me muevo en muchas áreas
juego en frases y argumentos
nunca
nunca me alejaré de la novela
porque es un campo propicio
para llegar a muchos
y muchas veces con tonalidades distintas
y explosiones de poesía.
Manuel Núñez del Prado Dávila
Escritor peruano
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